
OBSESIONADO en su búsqueda de pisos movedizos, Julio camina su barrio pisando las baldosas flojas.
Considerando que el 93% de las veredas de su barrio es del tipo "baldosa floja", para la mayoría de los políticos del municipio, Julio es el vecino perfecto; él jamás se ha quejado del estado de las veredas (tampoco de los baches, pozos y trincheras de mascotas cruzadoras de calles en el asfalto, pero esta es una historia de veredas).
Un martes de hace poco se aparece un camión municipal y una dotación de buenos trabajadores y, en menos de un día, a Julio le arreglan la vereda, de esquina a esquina, se la dejan una joyita e incluso alguien le pasa un sobre con sello municipal por debajo de la puerta. Adentro hay una nota con sello municipal y un agradecimiento por no haberse quejado nunca del estado deplorable de las veredas. Lo firma un consejal cuyo apellido termina con la letra "equis".
Sucedió entonces que, desde ese día, Julio no quiso salir más de su casa y en una semana se gastó casi todo el sueldo con motomandados. Una semana se pasó caminando adentro de su casa, dando vueltas y vueltas, buscando una solución a su traumático problema hasta que se le ocurrió llamar al último motomandados y le pidió que le comprara con alta urgencia un par de zancos.
2010, Alicia Berruti.
Loma Negra, Partido de Olavarría, Prov. de Buenos Aires, Argentina.
Te aplaudo, querida Tato; un tono irónico y muy placentera para asimilar para el alma lectora sobre una realidad grave y permanente, poco digestible para nuestro espíritu de cada día.
ResponderEliminarEl final, tu epifanía.
A seguir escribiendo y felicitaciones. Lo segundo anque también tiene que seguir haciendo lo primero, para el Songuito Maravilla :O)
Los abrazo.
Juan Carlos, Alicia,
ResponderEliminarY me encanta como la autora se mete en la psique de este personaje y cómo resuelve la historia.
Abrazo
Comentó YANINA CASTAÑO:
ResponderEliminarMuy interesante!! Con sencillez e ironía justas se lleva a la literatura un problema cotidiano.
Beso grande!!!!
Comentó JUAN ENNIS:
ResponderEliminarHermosa historia en la que me reconozco. El arte logra dar vuelta a la realidad como una media, y la vemos con más claridad. Gracias y felicito a la autora y al ilustrador.
Me encanta Alicia. Estaria bueno alcanzarle una copia al intendente. besos
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